¡Hola a todos!
Este lunes salió publicada la
lista provisional de los firmantes y eso significa que la cuenta atrás ha empezado de verdad. Diez días después de
la provisional se publicará la definitiva y partir de ahí las cosas vendrán una
detrás de otra cumpliéndose los plazos legales.
Si bien es verdad que desde la
publicación de la convocatoria el ánimo cambia, empiezan a aparecer los
primeros nervios, los temores de que no se llega con el temario, el querer
hacer más de lo que se está haciendo para que no nos pille el toro, parece que
hasta que no salen las listas uno no acaba de ser consciente del todo de que
los meses pasan, y pasan rápido, y cada vez queda menos (o al menos eso me pasa
a mí). Como digo, ahora vendrá una cosa detrás de la otra: listas definitivas,
tribunales, sorteo y fecha en la que se empieza.
Creo que en mi interior algo me
decía que las listas se iban a publicar en breves porque la semana pasada no
fue una buena semana. Estaba algo intranquila y con falta de concentración. Me
costó algo más de lo normal sacar los temas adelante y eso se reflejó en el
cante del lunes (no me gustó nada el cante que hice).
El martes empecé semana de
estudio pero me notaba agobiada en casa, así que decidí que al día siguiente
iría a la biblioteca (llevaba cinco años sin pesar una biblioteca). Sentía que
necesitaba un cambio de aires, salir de estas cuatro paredes. Y para mi
sorpresa el día de estudio se dio mejor de lo que me esperaba. Es verdad que el
principio me costó un poco más concentrarme. La tranquilidad y el silencio de
casa no es el de una biblioteca, pero si he me sacado la carrera estudiando en
la biblioteca podría pasar un día de estudio allí. La verdad es que este cambio de escenario, de
opozulo me ha venido bien porque me ha permitido coger aire para dar impulso.
Esta no es una ciudad de
tradición opositora como pueden serlo otras, pero he de decir que me ha
sorprendido gratamente ver que esto está cambiando. La mayoría de lo que estábamos
allí éramos opositores (la sala no es muy grande) y he de decir que se nos
identifica fácilmente, no sólo por tener un crono encima de la mesa, sino
porque somos más cuadriculados, más organizados, más programados que el resto.
Descansos cada dos horas de cinco minutos y vuelta al estudio, con tapones y
sin móvil por en medio.
Y vosotros, ¿necesitáis o habéis
necesitado un cambio de aires?
¡Mucho ánimo a todos!
¡Gracias por leerme!
Un beso!
María :)